Cómo sobrevivir a tu primer rodaje sin perder la dignidad (ni el mechero)

por Jenny

5/30/20252 min read

Una productora en el set de rodaje
Una productora en el set de rodaje

Empiezas el día con una ilusión tremenda. Te has levantado antes que nunca, llevas puesta una camiseta negra que pone "crew" aunque nadie te la haya dado, y llegas al rodaje como si fueses a colarte en el backstage de un bolo de los Sex Pistols. Spoiler: no hay glamour. Solo hay cinta americana, cafés fríos y un estrés que nadie menciona.

Si es tu primer rodaje, bienvenida al circo. Aquí van unos cuantos consejos para que no parezcas una novata del todo y, sobre todo, para que no acabes llorando en el baño del catering, como me pasó a mí.

Cállate y observa

En los rodajes se habla mucho sin hablar. Si estás empezando, no pillas nada. Aprende a mirar: quién manda (que no siempre es quien más grita), quién soluciona, quién se escaquea. El que parece estar hablando con una lámpara mientras murmura tecnicismos raros seguramente sea el foquista. No le molestes.

No toques una cámara. Nunca.

Ni la mires con ojitos. Las cámaras son sagradas. Si el director de foto te ve rozándola, tu carrera en el cine se ha terminado antes de empezar. Si hay que moverla por lo que sea, llama a alguien que tenga nombre de personaje de cómic, como “el Gafa” o “el Jefe”.

No seas el típico actor frustrado

Si te han llamado para llevar cafés o sujetar la claqueta, hazlo con dignidad. Nadie quiere al que va de director en la sombra. Se huele desde lejos. Si vales, ya te verán. Mientras tanto, quédate a un lado y no bloquees el plano, por favor.

Lleva mechero, pero que no te dé pena

En un rodaje tu mechero va a desaparecer. Lo perderás, lo prestarán, lo reventará alguien encendiendo un difusor. Acéptalo. Llévate uno que te dé igual perder. También pilas. Siempre hay alguien que las necesita, y eso da puntos.

El equipo técnico es una mafia (buena)

Son una tribu. Se entienden sin hablar, se hacen favores, se cuidan. Si les respetas, te salvas. Si te pasas de listo, prepárate para ser el meme del grupo de WhatsApp ese mismo día.

Come cuando puedas, no cuando tengas hambre

El catering desaparece a una velocidad absurda. Si ves una bandeja con tortilla de patatas y sigue caliente, no digas “ya vuelvo”. No volverás. Y si vuelves, quedarán ensaladas tristes y yogures raros.

Ríete, aunque no pilles el chiste

Hay bromas internas, muchas referencias técnicas, mucho código. Al principio no entiendes nada. Ríete igual. Ya aprenderás qué narices es una “chincheta de luz” o un “plano pitufo”.

Sobrevivir a un rodaje no va de tener talento. Va de tener aguante. Y espaldas fuertes. Te dolerá. Pero si aguantas el primero, repetirás. Porque en medio del caos, pasa algo. Una historia cobra forma. Y eso engancha.

Y si no te mola, siempre puedes hacerte streamer. O político.